
Mi vínculo con el queso
El primer recuerdo que me viene a la mente sobre mi vínculo con el queso, es estar comiendo un pedazo de manchego semicurado y uvas verdes en casa de mi abuela.

Empezando desde mi Tatarabuelo Bernardo en el rancho Llano de la cruz, Michoacan, en donde se producía queso Cotija con el excedente de la leche que tenían del ganado vacuno, hasta mi padre con sus historias cada mañana de camino a la central de abastos, en donde se ubica Marga, nuestra empresa familiar fundada en 1945.
Una de las preguntas que le hice a mi padre, ¿Quién fue tu primer cliente, algo que a mi me emociono mucho cuando me llego el primer pedido en Envía Gourmet; Gracias Andrea.
El primer recuerdo que me viene a la mente sobre mi vínculo con el queso, es estar comiendo un pedazo de manchego semicurado y uvas verdes en casa de mi abuela y ahora mi sobrino Benjamín es lo primero que pide cuando llega a casa de mis papas. Es difícil escoger mi queso favorito ya que cada uno me evocan recuerdos y me trasladan a lugares diferentes, pero hoy puedo decir que uno de los que más disfruto es el Frans Hals, con 300 días de maduración un gouda holandés de leche de cabra. Otro de los vínculos que he llegado a apreciar es el que he fortalecido con mis hermanos y mi padre, estando día a día aprendiendo de la experiencia que ellos han forjado durante tantos años.

El consumo de leche previo a la colonización era inexistente.
El consumo de queso en México
Un breve resumen…
La historia del queso en México es un viaje fascinante que se remonta a la llegada de los españoles en el siglo
XVI, quienes introdujeron cabras y ovejas y, posteriormente ganado vacuno. El consumo de leche previo a la
colonización era inexistente. En un principio los indígenas eran intolerantes a la lactosa por lo que el consumo
de productos lácteos no era muy alto. Además el queso en ese tiempo era un alimento de valor económico alto al
que era difícil acceder.

El consumo de leche previo a la colonización era inexistente.
Este intercambio cultural y la introducción de técnicas queseras marcaron un hito fundamental en la historia de México. Con el tiempo, la mayoría de los quesos que se producen en México han sido elaborados por agricultores y queseros locales, muchos de los cuales siguen utilizando leche cruda de la región. Esto no solo ha permitido la preservación de técnicas artesanales, sino también la creación de una rica diversidad gastronómica que se manifiesta en los innumerables tipos de queso que ahora forman parte del patrimonio culinario del país.
Espero que el consumo de queso en México siga creciendo ya que es un alimento con tantas propiedades que ha sido satanizado por muchos años.